Reflexiones y respuestas para los
“Testigos de Jehová”
Por
Bernardo López Ríos *
* Católico, Apostólico y Romano, fiel a las
enseñanzas de Su Santidad el Papa Francisco, de Su Santidad Benedicto XVI, Papa
Emérito, del Concilio Vaticano II y del Magisterio de la Iglesia Católica
El
idioma inglés no se hablaba en los tiempos de Cristo, por lo cual, la
traducción de su incompleta edición de la Biblia no es confiable. Más aún, en
una librería católica puede buscarse el cuadernillo “Fraudes a la Biblia por los Testigos de Jehová”, del Padre Rafael
Cervantes Palomino, S.J., editorial Verdad y Vida, México.
El católico alemán Johannes Gutenberg inventó la imprenta en 1436 y
el primer libro impreso fue la Biblia (73 libros) que incluye los 7 libros que
les faltan a los Testigos de Jehová. Antes de la rebelión de Martín Lutero (1517),
la Iglesia Católica ya había publicado 156 ediciones de la Biblia en latín,
seis en hebreo y 26 en diferentes lenguas, incluyendo el ruso.
La
Tradición Oral y la Biblia: La Tradición es la Palabra de Dios no
contenida en la Biblia, sino transmitida por Jesucristo a los Apóstoles y por
éstos a la Iglesia. La Biblia tuvo un primer momento que fue oral; eran
tradiciones que fueron transmitiéndose de generación en generación, hasta
llegar un momento en que para evitar alteraciones y distorsiones se dispuso
ponerla por escrito.
Para que la salvación, es decir el Evangelio,
llegara a todo el mundo, Jesús no escribió
nada. (De hecho, sólo 6 Apóstoles, incluyendo a San Pablo, escribieron. Los
demás no lo hicieron y exclusivamente predicaron de PALABRA lo que Jesús y el
Espíritu Santo les enseñaron. Concilio Vaticano II, Dei Verbum, n. 7). Lo que
hizo fue fundar la Iglesia, dirigida por los apóstoles con San Pedro a la
cabeza.
Los Testigos de Jehová rechazan las imágenes
católicas, pero tienen imágenes en sus publicaciones y confunden ídolos con imágenes.
En efecto, los católicos sabemos
perfectamente bien que Dios prohíbe la idolatría (Éxodo 20, 1-5), pero Dios
también manda hacer imágenes: la serpiente de bronce (Números 21, 8); los
querubines del Arca de la Alianza (Éxodo 25, 18). Era tan claro para los israelitas
que lo prohibido por Dios era fabricar ídolos, que en el templo construido por
Salomón, una de las maravillas del mundo, estaba decorado en muros y puertas
con imágenes de querubines, de toros y bueyes y de palmas y olivos: Imágenes en
el templo de Dios (1 Reyes 6 y 7).
San
Pablo llama “hermanos” a los Tesalonicenses, Gálatas, Romanos, Efesios,
Colosenses, etc. Por lo tanto, es un capricho afirmar que esa palabra “hermano”,
en el caso de los Evangelios que citan los Testigos de Jehová, se deba tomar en
su sentido más estricto.
A la entrada de las iglesias católicas hay casilleros
con folletos E.V.C. Búsquese el No. 91, intitulado “100 preguntas a un Testigo de Jehová” o véase en este link:
Léase también “¿Qué hay detrás de las sectas?”, en este link:
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